Dermatitis Atópica

Cargado el: 07/08/2022

Dr Edgardo José Jares

MP:34.841 MN:47.713

Av Rivadavia 14.276 Ramos Mejía

TEL: Turnos:4469-6900

Turnos online: http://cmpramosmejia.com.ar/turnos-online/

Directo: 4469-6914

Sucre 2496 2ºD Cap

TEL/WhatsApp: 115912-4837

Turnos online: https://blipdoc.com/portal/jares



La dermatitis atópica, algunas veces llamada eczema, es una enfermedad alérgica de la piel que afecta aproximadamente del 1 al 3% de los niños y cerca del 27% de los lactantes nacidos de madres que padecen una enfermedad alérgica. El ochenta por ciento de los niños con dermatitis atópica desarrollan síntomas antes del año de edad pero, afortunadamente, cerca de la mitad de estos niños quedan libres de síntomas a la edad de dos años. La dermatitis de la otra mitad no desaparecerá hasta el final de la adolescencia, aunque una pequeña fracción nunca se aliviará completamente. Si la dermatitis atópica hace su primera aparición en un niño mayor de un año de edad, la posibilidad de remisión temprana es menos probable.

Diagnóstico de los Síntomas

La comezón, a veces intensa, es el síntoma característico. Con el tiempo, las lesiones tienden a secarse y descarnarse, y si se introduce una infección vital o bacteriana por efecto del rascado, las lesiones afectadas supurarán.

En los lactantes, la dermatitis atópica aparece comúnmente en el rostro y en los pliegues detrás de las orejas, en los codos, detrás de las rodillas y en las nalgas. Cuando el rostro está comprometido, puede formarse un pliegue prominente a lo largo de los párpados inferiores, llamado línea de Dennie. En niños, la piel de la parte externa de los brazos y las piernas también puede verse afectada. Los niños y adultos con dermatitis atópica desarrollan una roncha blanca, elevada cuando la piel no afectada se comprime de modo firme con un abate lenguas o la parte posterior de una uña.

Esto se denomina dermatografía blanca (escritura blanca), y es una maniobra usada por el médico cuando el diagnóstico de dermatitis atopica es incierto. Entre otras pruebas diagnósticas que son útiles, sobre todo si no hay antecendentes familiares de alergia, y el paciente no tiene asma ni alergia nasal, se incluye un examen de sangre para medir anticuerpos circulantes IgE, que se encuentran elevados en el 80% de pacientes con dermatitis atópica, además de pruebas cutáneas de alergia. Estas últimas son útiles para identificar alimentos o sustancias inhaladas tales como el polvo casero, ácaros del polvo, pelo y caspa de animales, o pólenes a los cuales el paciente es alérgico, y que pueden ser responsables de las exacerbaciones de las lesiones cutáneas.

Tratamiento

Si el paciente reacciona de modo importante a los alimentos en las pruebas cutáneas, estos deberán ser eliminados de la dieta, y el efecto de suprimirlos deberá ser observado por el paciente o su familia. Si la piel mejora, y la picazón disminuye de un modo importante, será aconsejable reintroducir el alimento o alimentos sospechosos uno por uno, estando pendiente de la reaparición de los síntomas originales. Si se determina que un alimento o alimentos son claramente los culpables, deberán eliminarse completamente de la dieta. Si es un alimento esencial, como la leche en los lactantes, su médico puede recomendarle sustitutos no alergénicos. Si se sospechan factores ambientales deberán tratarse del mismo modo.

La comezón puede disminuir bañandose con agua tibia y usando jabón sin olor, secando la piel apoyando la toalla, y no frotando, y aplicando una crema o loción humectante y/o emoliente inmediatamente.Para lograr un buen efecto de los corticoides tópicos, el paciente se debe bañar de la siguiente manera:

- Preferentemente de inmersión.

- Agua tibia, agradable.

- Corto, no más de 5 minutos.

- Usar un "pan limpiador" (Cetaphil, Avene, Neutrógena, todos NR) o jabón

con crema tipo Dove (NR)

- Enjabonar lo justo y necesario para garantizar una buena higiene.

- Secado por contacto, sin frotar.

- Dentro de los tres minutos de salir del agua, colocar las cremas con corticoides o los emolientes.

Esto último es indispensable para garantizar una buena acción de los corticoides tópicos, de esta manera, la necesidad de corticoides por vía oral se transforma en un último recurso. Cuando la piel del paciente está mejor, se debe reemplazar por emolientes (en Argentina Dermaglós, Bagovit o Vaseline emulsión para piel sensible).

En la mayoría de los casos, aún de los rebeldes, con un baño y una aplicación diaria bastan para que en un período de 10 días el cuadro esté casi totalmente dominado. Si no responde, se pueden realizar dos o tres baños diarios seguidos de la aplicación de corticoides.

Debido a la alta incidencia de infecciones sobreagregadas que tienen este tipo de pacientes, se prefiere el uso de cremas polivalentes (corticoides, por ej. betametasona+antimicóticos+antibióticos), para luego pasar a cremas

exclusivas con corticoides, en lo posible de menor potencia y, finalmente, recurrir a los emolientes para proteger la piel durante los períodos de intercrisis.

Las cremas o unguentos con corticoides son útiles para su aplicación en áreas gravemente afectadas, pero no deberán aplicarse en el rostro, salvo indicación médica expresa. El otro aspecto que se debe controlar de una manera efectiva es el prurito. Ciertos antihistmínicos son útiles para aliviar la comezón.Una buena dosis de Hidroxicina generalmente es suficiente para liberar al paciente de la molestia. Los antihistmínicos no sedantes de acción prolongada, como la cetirizina o loratadina son recomendables. Para mejorar los síntomas las uñas deben mantenerse cortas, y las telas de la ropa deben ser suaves y porosas. Los detergentes de lavado deben ser susves y libres de perfume. Si existe supuración de las áreas afectadas de la piel, puede ser necesario el tratamiento antibiótico. Consultar rapidamente al médico.

Pronostico

Un estudio de seguimiento de 21 años demostró que de los niños que desarrollan dermatitis atópica en la lactancia, cerca del 30% no tuvo problemas en la piel más adelante en la niñez, y no desarrolló otras enfermedades alérgicas. Veiniun años más tarde, el 35% no tenía lesiones cutáneas, pero había desarrollado asma y/o rinitis alérgica; el 20% aun tiene dermatitis atópica, y sólo el 15% tuvo dermatitis más asma y/o rinitis. Sin embargo no está claro el grado de cumplimiento de los tratamientos de estos pacientes. Es probable que la observación estricta de la dieta, medicación, y medidas ambientales podrían producir mejores resultados.


Adaptado de “Tips to Remember” AAAAI